(Por favor desplácese hacia abajo para ver la traducción al español de esta publicación.)
By Pat Dobbs
A friend challenged me to come up with the benefits of having hearing loss (other than that I can take out my hearing devices when a fire siren goes by and that my partner’s snoring doesn’t bother me). I was stumped.
As I was thinking about it, I received an email from my longtime friend Janine. I met her while living in Haines, a small town in southeastern Alaska. She was the program manager of the local radio station and just happened to have a hearing loss. So when I suggested we do a radio interview on hearing loss, she readily agreed. That started our friendship.
In her email, she told me that she had come down with a bad case of pneumonia and had to be airlifted to Juneau. She recovered, but then relapsed, and had to fly to Seattle for further treatment. There she found out that the pneumonia was caused by a slow growing cancerous tumor in her lungs and that she would need multiple operations and treatment. A handful for sure.
Janine’s mother asked her how she was able to keep so much strength despite her trials. She pulled out her hearing aid and showed it to her mom. Reflecting on that experience afterward she wrote:
“For better or worse, my hearing loss has been a damn good coach in how to navigate uncertainty, confusion, unknowing, and fear. I feel like it’s given me a little bit of a leg up. The longer I live, the more grateful I am for my hearing loss, which isn’t to say I would wish it on anybody or that it’s been peaches and cream and smooth sailing. But it’s given me a lot of grace, especially in this hard time.”
Wow! So uplifting! Could I say the same or even just part of it? I had to think about it.
For a large part of my life, I pretended to hear when I didn’t—which meant I was never sure if I had missed something or not—not a fun place to be. That made me want to make myself as small as possible… like a mouse.
It negatively affected all aspects of my life. In my personal life I never expressed my thoughts or needs. And in my business life. I would have been more productive if I had brought my hearing loss out in the open. But no, I didn’t.
Once I realized that hearing loss isn’t anything to be ashamed of, little by little, I started to speak up for myself. The more I did, the more confident I felt. This confidence has reached all areas of my life.
I realize that being confident helps me deal with life’s uncertainties. I’m not sure why but it enables me to look at things from a more positive perspective. This gives me an ease in dealing with whatever life hands me. And of course—like everyone—I have my challenges. It certainly doesn’t mean everything comes easily to me. But it does come easier than before.
I’m not going to say I became a lion, but I was no longer a mouse.
Today I’m proud to be a DEI (diversity, equity, and inclusion) coach specializing in hearing loss. I work with companies to help them understand what hearing loss is, how unrecognized hearing loss can negatively affect their workplace, and how they can accommodate that challenge to be more productive.
Like Janine, I wouldn’t wish hearing loss on anyone as it does have its challenges. But it has given me a grace and courage that has made my life happier and more peaceful.
What about you? What have been the positives of your hearing loss?
Hearing Health magazine staff writer Pat Dobbs has an adult-onset hearing loss and wears bilateral cochlear implants. She founded the Hearing Loss Association of America, Morris County Chapter, New Jersey, in 2011, and today is president of the international online hearing loss support group, Say What Club, saywhatclub.org. Now a resident of Deer Isle, Maine, she formed the DownEast Chapter of HLAA. To learn more, email pat@coachdobbs.com or visit her website beingheard.net.
¿Existen Beneficios en la Pérdida Auditiva?
Por Pat Dobbs
Un amigo me desafió a que propusiera los beneficios de tener pérdida auditiva (aparte de que puedo quitarme los audífonos cuando pasa una sirena de bomberos y que los ronquidos de mi pareja no me molestan). Me quedé perpleja.
Mientras pensaba en ello, recibí un correo electrónico de mi amiga de toda la vida, Janine. La conocí mientras vivía en Haines, un pequeño pueblo en el sureste de Alaska. Ella era la gerente de programación de la estación de radio local y casualmente tenía pérdida auditiva. Así que cuando le sugerí que hiciéramos una entrevista de radio sobre la pérdida de audición, ella aceptó de inmediato. Así comenzó nuestra amistad.
En su correo electrónico, me dijo que había contraído un caso grave de neumonía y que tenía que ser trasladada en avión a Juneau. Se recuperó, pero luego tuvo una recaída y tuvo que volar a Seattle para recibir tratamiento adicional. Allí se enteró de que la neumonía era causada por un tumor canceroso de crecimiento lento en sus pulmones y que necesitaría múltiples operaciones y tratamiento. Un puñado, con toda seguridad.
La madre de Janine le preguntó cómo era capaz de mantener tanta fuerza a pesar de sus pruebas. Sacó su audífono medicado y se lo mostró a su madre. Reflexionando sobre esa experiencia después, escribió:
"Para bien o para mal, mi pérdida auditiva ha sido un buen entrenador sobre cómo navegar por la incertidumbre, la confusión, el desconocimiento y el miedo. Siento que me ha dado un poco de ventaja. Cuanto más vivo, más agradecida estoy por mi pérdida auditiva, lo que no quiere decir que se lo desearía a nadie o que haya sido melocotones y crema, y un navegar tranquilo. Pero me ha dado mucha bendición, especialmente en este momento difícil".
¡Wow! ¡Muy edificante! ¿Podría yo decir lo mismo o incluso solo una parte de eso? Tuve que pensarlo.
Durante gran parte de mi vida fingí escuchar cuando no lo hacía-lo que significaba que nunca estaba estaba segura de si me había perdido algo o no- no era una posición divertida en la cual estar. Eso me hizo querer volverme lo más pequeña posible... como un ratón.
Eso afectó negativamente todos los aspectos de mi existencia. En mi vida personal nunca expresé mis pensamientos o necesidades. Ni en mi vida empresarial. Habría sido más productivo si hubiera sacado a la luz mi pérdida auditiva. Pero no, no lo hice.
Una vez que me di cuenta de que la pérdida auditiva no era algo de lo cual avergonzarse, poco a poco, comencé a hablar por mí misma. Cuanto más lo hacía, más segura me sentía. Esta confianza ha llegado a todos los ámbitos de mi vida.
Me doy cuenta de que tener confianza me ayuda a lidiar con las incertidumbres de la vida. No estoy segura de por qué, pero me permite ver las cosas desde una perspectiva más positiva. Esto me da una facilidad para lidiar con lo que sea que la vida me depare. Y, por supuesto, como todo el mundo, tengo mis retos. Ciertamente no significa que todo sea fácil para mí. Pero es más fácil que antes.
No voy a decir que me convertí en un león, pero ya no era más un ratón.
Hoy estoy orgullosa de ser entrenadora de DEI (diversidad, equidad e inclusión), especializada en pérdida auditiva. Trabajo con empresas para ayudarles a entender qué es la pérdida auditiva, cómo la pérdida auditiva no reconocida puede afectar negativamente a su lugar de trabajo, y cómo pueden adaptarse a ese reto para ser más productivos.
Al igual que Janine, no le desearía la pérdida auditiva a nadie, ya que tiene sus desafíos. Pero me ha otorgado una gracia y un coraje que han hecho mi vida más feliz y más pacífica.
¿Y qué me dice de Ud.? ¿Cuáles han sido los aspectos positivos de su pérdida auditiva?
Pat Dobbs, redactora de la revista Hearing Health, tiene una pérdida auditiva iniciada en la edad adulta y usa implantes cocleares bilaterales. En 2011 fundó la Asociación Americana de Pérdida Auditiva (HLAA, por sus siglas en inglés), Capítulo del Condado de Morris, Nueva Jersey, y hoy es presidenta del grupo internacional de apoyo en línea para la pérdida auditiva, Say What Club, saywhatclub.org. Ahora residente de Deer Isle, Maine, formó el Capítulo DownEast de la HLAA. Para obtener más información, envíe un correo electrónico a pat@coachdobbs.com o visite su sitio web beingheard.net.
Traducción al español realizada por Julio Flores-Alberca, marzo 2024. Sepa más aquí.
Our results suggest that mature cochlear supporting cells can be reprogrammed into sensory hair cells, providing a possible target for hair cell regeneration in mammals.